Los 6 cocineros aficionados en competencia se enfrentaron nuevamente a un desafío en equipos y 3 de ellos, tuvieron que dar lo mejor de sí para seguir en la cocina y pasar a la siguiente instancia.
Ambos equipos recibieron asesoramiento del jurado, y tras la vista, quienes más inconvenientes demostraban, eran los miembros del equipo Rojo. Una vez finalizado el tiempo, los 60 niños atletas del Comité Olímpico Paraguayo, comenzaron con la degustación de los platos para posteriormente votar por el grupo que logró mejor sabor con las propuestas.
Una vez en la cocina, el último desafío de la caja misteriosa, fue elaborar una deliciosa “Paella” que sorprenda a Rodolfo, Eugenia y José, y para ello, los sentenciados tenían 60 minutos. Culminado el tiempo, los Chef degustaron las 3 propuestas y luego de la deliberación, el primero en subir al balcón fue Diego.
Ahora son solo 5 los cocineros aficionados que continúan con el sueño de convertirse en el primer MasterChef Paraguay.